Empresas y ahorristas huyen de las deudas en dólares: cancelan créditos comerciales y saldo de tarjetas
05-09-2019
Las altas tasas en pesos y la mayor reticencia de los bancos a otorgar nuevos préstamos al sector privado no evitaron que las empresas aumentaran sus deudas en pesos durante agosto, principalmente con líneas de corto plazo. Del otro lado, el salto del dólar llevó a muchas compañías a cancelar sus deudas en moneda extranjera y a las familias a pagar la mayor parte del saldo en esa divisa en moneda extranjera.
En rigor, el stock de descuento de documentos (cheques y pagarés) en dólares se redujo 676 millones de dólares, una baja de 5,2%. Algo similar ocurrió con los adelantos de cuenta corriente en dólares, donde la caída fue de 43 millones, poco más del 11% del stock. Estas dos líneas concentran casi el 83% de todo el financiamiento en moneda extranjera que otorgan los bancos.
La tendencia deja en evidencia que las empresas, por un lado, dejaron de endeudarse en dólares tras el salto de la divisa; y, por otro, buscaron cancelar anticipadamente su financiamiento. Por las regulaciones prudenciales que el BCRA impuso tras la crisis de 2001, los bancos sólo pueden financiar con dólares a exportadores o proveedores de exportadores. O sea, a aquellos que tengan ingresos comprobados en moneda extranjera.
Después de la reunión de urgencia que el domingo por la tarde tuvo Guido Sandleris con los principales bancos para garantizarle la entrega de billetes de dólares, trascendió que el organismo monetario les pidió que cobren la mayor parte de sus préstamos y que frenen el otorgamiento de nuevas líneas. De todos modos, un banquero que participó de esa reunión confirmó a iProfesional que ese mensaje nunca existió y que la caída se debe, básicamente, a que las empresas dejaron de tomar estos préstamos.
"La volatilidad del tipo de cambio ha limitado al mínimo la demanda de estas operaciones. Además, la suba del riesgo país y su impacto sobre el costo de las financiaciones en moneda extranjera actúa como un incentivo al desendeudamiento y la cancelación de operaciones", comentó Guillermo Barbero, socio de First Capital Group en un comunicado de prensa.
Otra tendencia que se registró en agosto fue que muchos hogares aprovecharon para cancelar el saldo de sus tarjetas en dólares. De hecho, según los últimos datos del BCRA, al 30 de agosto, el stock de préstamos con tarjetas en dólares caía u$86 millones, un recorte del 21,45%. Esto se explica, en parte, en que muchas familias recortaron sus gastos en el exterior y otras buscaron cancelar la mayor parte posible de su saldo, para evitar el riesgo de un nuevo salto en la cotización.
Empresas se endeudan en pesosPor otro lado, al 30 de agosto, el stock de adelantos en cuenta corriente se ubicó en $174.320 millones, un alza de 26.003 millones (17,53%) respecto al nivel en que comenzó el mes. Así, en términos nominales es el salto más alto para este este tipo de financiamiento, conocido también como el "giro en descubierto", y uno de las más utilizados por las empresas para financiar su caja diaria.
La tasa que aplican los bancos por el "rojo" en las cuentas corrientes comenzó el mes en torno al 64% anual, pero con el salto que experimentó el rendimiento de las Leliq tras las PASO, el interés llegó al 85% anual y ahora llega al 90%.
Pese a este aumento en el costo del crédito, muchas empresas lo vieron como la mejor alternativa para hacerse de pesos, ya sea para cancelar deuda en dólares como para evitar no vender los dólares que tenían atesorados. Un dato que muestra esto es que el lunes post PASO, cuando la divisa extranjera se disparó casi 30%, el stock de adelantos aumentó poco más de 25.000 millones de pesos, una suba más que importante para un solo día.
En la misma línea, el descuento de documentos en bancos creció $8.278 millones, un alza de 3,78% después de haber cerrado julio con una caída de 4.458 millones. Aquí hay muchos bancos que siguen ofreciendo una tasa del 28%, como parte del plan de subsidio que el Gobierno viene implementando hace varios meses.
"Realmente, llama la atención este incremento en el endeudamiento. Creemos que está originado en intereses capitalizados y no en nuevas financiaciones solicitadas", señala Barbero.
Con respecto a las familias, también se notó cierto repunte en la financiación con tarjeta de crédito en pesos, impulsada en gran parte por el plan Ahora 12 que revivió el Gobierno. En rigor, el stock aumentó $16.181 millones, un alza que si bien representa un salto de apenas el 3,9%, es el más fuerte en este segmento en muchos meses.
"El alza de precios en bienes semidurables estimula la captación de operaciones del programa Ahora 12, pues el consumidor aspira a obtener una ventaja comprando en cuotas fijas y sin interés. De esta manera se incorpora al mercado tomador de créditos a un segmento socioeconómico de mayor poder adquisitivo y con baja propensión al endeudamiento", comentó Barbero.
Todas estas subas, de todos modos, se dan en un contexto de caída del crédito en términos reales, ya que en todas las líneas el crecimiento fue menor a la inflación.
La recesión que comenzó a mediados del año pasado hizo que muchas empresas y familias reduzcan su nivel financiamiento, pero el ajuste monetario que desde octubre encaró Guido Sandleris -como parte del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional- acentuó esta tendencia, que está muy lejos de mostrar un repunte.
Este plan no sólo llevó a las tasas a niveles exorbitantes, alejando las posibilidades de financiamiento al sector privado, sino que además captó gran parte de la liquidez de los bancos con las famosas Leliqs, lo que en economía se conoce como "crowding out". Eso rediagramó el negocio bancario, con las entidades focalizadas en colocar sus pesos en el Banco Central en lugar de financiar a empresas y personas físicas.