Tras el repunte de la inflación, los plazos fijos que ajustan por UVA crecieron 75% en febrero
12-03-2019
La aceleración de la inflación a partir de enero y el alza de las expectativas para los próximos meses, junto con una fuerte caída en las tasas de los plazos fijos tradicionales, reavivaron el interés por este tipo de colocaciones, que en enero habían registrado su menor nivel desde la corrida cambiaria de finales de agosto de 2018.
El despegue de los plazos fijos UVA arrancó en la segunda parte de febrero, luego de que el Indec diera a conocer que el índice de precios al consumidor (IPC) de enero alcanzó el 2,9%, superando las expectativas del mercado.
Pese a la baja de tasas, los plazos fijos tradicionales acumulan cinco meses consecutivos de suba
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Es por eso que si se toma la variación de estas colocaciones al cierre de mes, el resultado es de un aumento de $10.573 millones (pasó de $14.015 millones a $24.588 millones), pero el promedio mensual arroja una caída de $50 millones (0,3%).
Según señaló Miguel Arrigoni, socio de First Capital Group, en febrero se generó "un traslado de plazos fijos tradicionales denominados en pesos a plazos fijos denominados en UVA, motivado por la cobertura de la pérdida de poder adquisitivo". "Cabe destacar que dicho panorama se vio enmarcado por una baja de más de 900 puntos básico en las tasas pasivas de referencia para la primera mitad de febrero", precisó en un informe publicado ayer por la consultora.
Según el Informe Monetario de febrero, publicado ayer por el BCRA, "los depósitos a plazo denominados en UVA mostraron un cambio de trayectoria en el transcurso de febrero, en un período en el que las tasas de interés pagadas en el segmento también aumentaron". La tasa pagada por los bancos a sus clientes por los depósitos indexados a 90 días (el plazo mínimo de colocación) promedió el 5,8%, 1 punto porcentual por encima del mes previo, mientras que la tasa pagada por depósitos en torno a 180 días alcanzó el 7,6%, lo que significó un incremento de 0,3 puntos porcentuales respecto de enero.
Pese a la baja de tasas, los plazos fijos tradicionales del sector privado crecieron un 1,4% en febrero, tomando la variación del stock al cierre del mes, mientras que aumentaron un 6,8% en promedio en términos nominales (1,7% real), con lo que acumulan cinco meses de suba ininterrumpida, según destaca el informe del Central.
Tocaron piso
En tanto, después de cuatro meses consecutivos de caída, el saldo de préstamos en pesos al sector privado aumentó 0,5% en febrero en términos nominales y ajustados por estacionalidad (cayeron un 2,6% real), impulsados principalmente por los créditos destinados al consumo. El crecimiento interanual, sin embargo, continuó desacelerándose y se ubicó en el 11 por ciento.
Dentro del segmento dirigido principalmente a las familias, las financiaciones con tarjetas aumentaron en promedio 2,5%, de la mano de una mayor recesión que impide a muchos consumidores afrontar el pago total de sus plásticos, y los préstamos personales, 0,5 por ciento.
"Esto podría hacernos presagiar que hemos llegado a lo más bajo de la curva, y que a partir de ahora podría comenzar una lenta recuperación aprovechando la aparición en los recibos de sueldos de los primeros resultados de las paritarias salariales", aseguró Guillermo Barbero, socio de First Capital Group respecto del incremento del stock de préstamos personales de febrero.
Los préstamos a las empresas prolongaron su caída en febrero, aunque a un ritmo menor que en los meses previos. A pesar de que sus tasas siguieron bajando, tanto el financiamiento mediante documentos a sola firma como los créditos a través de adelantos en cuenta corriente cayeron alrededor de 2% el mes pasado nominalmente y con ajuste estacional.
En tanto, entre los préstamos con garantía real, prácticamente se compensó el incremento de 0,8% que registraron los hipotecarios con la caída de 0,7% de los créditos prendarios, destaca el informe del BCRA.